sábado, 4 de febrero de 2012

Líneas de Denuncia Confidenciales Herramienta Poderosa Contra el Fraude




Las estadísticas muestran que bajo condiciones de presión, oportunidad y racionalización, muchas personas son capaces de cometer un fraude»
L.A.E. José Claudio Treviño, CFE, CFI


El tema del fraude ha adquirido gran relevancia en la actualidad y demanda mayor atención, por parte de las empresas nacionales e internacionales, a raíz del escándalo provocado por estafas de enormes proporciones y de las legislaciones promulgadas para enfrentarlas, como la Ley Sarbanes-Oxley

Este tema se discute también ampliamente en el mundo empresarial, pero la evidencia muestra que se tiene una comprensión limitada del mismo, tanto por su propia naturaleza como por los mitos que han surgido al respecto.

Entre estos mitos se encuentra que la mayoría de la gente es inmune a la tentación de cometer un fraude y que casi todos los fraudes permanecen ocultos. Las estadísticas muestran que bajo ciertas condiciones de presión, oportunidad y racionalización, muchas personas son capaces de cometer un fraude. Asimismo, hay pruebas de que en la mayoría de los casos, los fraudes son conocidos por personal de la empresa ajena a la situación. A este tipo de mitos se debe que pocas empresas hayan logrado manejar casos de fraude en forma eficaz y que lo enfrenten sólo cuando un hecho fraudulento afecta, tanto a las finanzas de la empresa como a su reputación.

Por otro lado, las empresas están tomando cada vez mayor conciencia de una serie de realidades con respecto al fraude. Por ejemplo, las estadísticas muestran que la auditoría tradicional no detecta la mayoría de los fraudes y que éstos se detectan más bien gracias a informantes internos o externos, incluso por accidente. Otra realidad es que el control interno adolece de ciertas limitaciones para la detección de fraudes, incluyendo la colusión, inconsistencia en su aplicación y supeditación gerencial. Por lo mismo, no es una barrera enteramente efectiva contra actos fraudulentos.

A partir del mayor entendimiento de estos mitos y realidades, y como consecuencia de los requisitos específicos establecidos por leyes como la Sarbanes-Oxley, en la actualidad se están desarrollando y aplicando nuevas herramientas y metodologías para la prevención y detección de fraudes, algunas de las cuales no siguen los lineamientos tradicionales de auditoría y control. Una de las herramientas que está resultando más efectiva para detectar el fraude es un sistema anónimo de informe de denuncias que permite a los empleados reportar hechos o sospechas de fraude o violaciones al código de ética de la empresa. El interés por las líneas de denuncia de fraudes y de violaciones al código de ética ha repuntado desde la aprobación de la Ley Sarbanes-Oxley, la cual exige en su sección 301 que las empresas que cotizan en la bolsa estadounidense, deben establecer mecanismos mediante los cuales los empleados de compañías públicas puedan reportar, en forma confidencial y anónima, asuntos relacionados con fraudes e irregularidades similares.

Sin embargo, es importante destacar que incluso aquellas empresas en México que no tienen la obligación de cumplir con dicha ley, ya sean públicas o privadas, grandes o pequeñas, pueden derivar beneficios del establecimiento de un sistema de denuncias confidenciales y de la promoción de una cultura que ayude a prevenir, detectar y abordar no sólo irregularidades contables, sino también fraudes y actos indebidos (como manipulación de licitaciones, corrupción y soborno), o colusión y robo (como sustracción de ganancias, desembolsos fraudulentos y robo de inventarios). Las líneas de denuncia, instrumentadas y utilizadas en forma correcta, son una herramienta central en la creación de esta cultura.

¿Qué es una línea de denuncia confidencial?
En su mínima expresión, una línea de denuncia consiste en una máquina contestadora que graba mensajes para que el personal autorizado de la compañía los reproduzca, o bien, en un sistema de traspaso de llamadas que las envía a un departamento interno. Sin embargo, este tipo de sistema puede disuadir a posibles denunciantes.

La mayoría de las líneas de denuncia se manejan por medio de sistemas telefónicos y mecanismos por Internet o Intranet, usados para dar cabida a denuncias y reclamaciones de los empleados. Muchas compañías han establecido estas líneas como parte de sus programas de ética corporativa a nivel mundial, ya sea directamente o mediante los servicios de terceros de un proveedor global. Al margen de las características particulares de la herramienta, el factor crítico es que el denunciante perciba tres elementos: a) la confidencialidad e integridad absoluta del sistema; b) el alcance y acceso adecuado, y c) el seguimiento de las denuncias reportadas.

Un sistema de detección que apoya a los informantes como lo es una línea de denuncias, insta a los empleados a que actúen cuando otros cometan actos ilícitos. Dicho sistema puede inspirar en los empleados la confianza de que reportar tales actos sirve a sus propios intereses y a los de la compañía. Ayuda también a desarrollar una cultura empresarial en la cual se reconoce el comportamiento ético, existe el compromiso de prevenir y detectar el fraude, y se responde en forma decidida y apropiada cuando surgen actos ilícitos. En este sentido, aun cuando la línea de denuncia es principalmente una herramienta de detección de fraude, también desempeña un papel importante en el proceso de prevención.

Por otro lado, además de dar cabida a denuncias sobre una posible actividad fraudulenta y de enviar un mensaje claro al personal que ayuda a prevenir y detectar el fraude, las líneas de denuncia ayudan a garantizar que la administración de la empresa enfrente, de manera eficiente, otras conductas no éticas o ilegales de sus empleados, como la discriminación y el acoso sexual.

Más allá de las ventajas financieras de la detección temprana de fraudes y otros actos ilícitos, la línea de denuncia le brinda a la administración de la compañía  la oportunidad de descubrir y abordar estos temas antes de que sean expuestos a los medios de comunicación, lo que protege a la compañía de la pérdida adicional de credibilidad ante los ojos de consumidores, inversionistas y otros accionistas.

Seleccionando un sistema
Desde hace años se han aplicado diversos sistemas para reportar fraudes en muchas organizaciones, algunos de manera interna, mientras que otros han sido operados por proveedores externos. Desde que se aprobó la Ley Sarbanes-Oxley, los proveedores han ampliado significativamente su base de clientes y han proliferado otros nuevos que buscan aprovechar las oportunidades del mercado.

Si la empresa decide poner en marcha esta herramienta, de manera interna o externa, existe una serie de factores clave para incrementar la eficiencia y eficacia en la operación de las líneas de denuncia:

• Disponibilidad de tiempo completo. La mayoría de los empleados y otros informantes, por lo general, no reportan una actividad ilegal durante las horas de trabajo. De acuerdo con estudios sobre las líneas de denuncia, al menos 40% de las llamadas se realizan por la noche o los fines de semana. Por otra parte, una llamada no respondida probablemente desalentará al denunciante a llamar de nuevo. La persona se sentirá nerviosa y quizá hasta amenazada, así que es preferible que haya un entrevistador capacitado para responder a las llamadas. Además, un denunciante nervioso puede omitir detalles importantes; un entrevistador capacitado sabrá qué preguntas hacer para asegurar que la compañía reciba suficiente información y pueda investigar la acusación.

• Anonimato y confidencialidad. Los empleados, probablemente, se sentirán incómodos llamando a un número interno o reportando su alegato a otro empleado, quien, tal vez, reconozca su voz o identifique al informante por algún detalle revelador en su denuncia. Por ello, debe mantenerse la confidencialidad y proteger al denunciante contra cualquier represalia. (Las secciones 806 y 1107 de la Ley Sarbanes-Oxley brindan protección a los denunciantes.)

• Sistema de administración de casos. Para garantizar que las quejas y denuncias sean rastreadas y respondidas, es necesario crear una base de datos de los informes originales que permita al administrador de la línea de denuncias (en su caso, al comité de auditoría) revisar los informes. Los datos capturados deben incluir qué se hizo para investigar el alegato, el veredicto final y las acciones disciplinarias o correctivas que se tomaron. En todo momento, es importante que el denunciante (o posible denunciante) perciba que el sistema genera una respuesta oportuna, consistente y completa, y que el seguimiento asociado se lleva a cabo con la profundidad adecuada.

Lanzando una línea de denuncias
Como toda nueva iniciativa, para lanzar una línea de denuncias se requiere un programa eficaz de comunicación y educación. El primer paso es que la administración anuncie los objetivos de un programa de línea de denuncias y la razón para implementarlo. En una compañía pública, la meta sería ofrecer a los empleados la oportunidad de comunicarse con la compañía y con el Consejo de Administración. Cada empleado debe recibir una carta o comunicado anunciando el programa, junto con una tarjeta de negocios con el número de la línea de denuncias. Los empleados deben conocer el programa en reuniones y los mensajes recibidos se deben reforzar en tablas de avisos colocados en todas las áreas de trabajo. Los nuevos empleados deberán captar esta información como parte de su capacitación.

La compañía debe documentar que los empleados han recibido la información acerca de la línea de denuncia y su uso adecuado. Para evitar abusos de la línea, como el que los empleados llamen para quejarse de una crítica “injusta” del menú de la cafetería, el programa de comunicación necesita dejar en claro el propósito de la línea de denuncias, al igual que los mecanismos apropiados para enfrentar las quejas en caso de que no se trate de algún acto ilegal. Además, algunas empresas pudieran considerar la ampliación del acceso a la línea de denuncia a proveedores y/o clientes, pero existe el reto de mantener una difusión de información y comunicación adecuadas sobre el mecanismo de denuncias y su uso apropiado.

Las líneas de denuncia ayudan a garantizar que la administración de la empresa enfrente, eficientemente, otras conductas no éticas o ilegales de sus empleados, como la discriminación y el acoso sexual»

Por lo anterior, es crucial que junto con este lanzamiento se aplique un programa de capacitación adecuado sobre el tipo de asuntos que debería reportarse por medio de la línea de denuncias, su operación y los procesos generales que se generarán. Este lanzamiento deberá ir acompañado de una capacitación que concientice sobre el fraude para que los usuarios del sistema desarrollen una sensibilidad adecuada a posibles señales de fraude y/o ilícitos, incluyendo los elementos fundamentales de presión, oportunidad y racionalización.

El manejo efectivo del fraude descansa sobre una combinación de actividades de control y prevención del mismo, herramientas y metodologías de detección y procedimientos estrictos de investigación. En este conjunto de actividades, las líneas de denuncia pueden funcionar como una herramienta central para la detección y prevención de fraudes e ilícitos.
 

Fuente: http://contaduriapublica.org.mx

Líneas de Denuncias: La Herramienta más Eficiente a Nivel Mundial para Prevenir y Detectar Fraudes


Autor: Martín Ghirardotti


La pérdida por fraudes es uno de los principales flagelos que atraviesa todo tipo de organización. A nivel internacional se estima que las empresas pierden por este concepto un 5% de su facturación anual . Es por ello que las compañías han destinado cuantiosos recursos destinados a la prevención y detección de este tipo de situaciones.

En este nuevo escenario, la prevención juega un rol clave, ya que una vez que el fraude es cometido la posibilidad de recupero es muy baja. Esto queda claramente evidenciado en cifras (ver grafico adjunto), destacándose que en el 42,1% de los casos de fraude no existe recupero.

La ACFE (Association of Certified Fraud Examiners) en su último Reporte Bianual destaca que las líneas de denuncias son la principal herramienta para la prevención y detección de fraudes corporativos a nivel mundial. Las cifras en este sentido son contundentes, ya que si un canal de reporte de irregularidades es correctamente implementado, el costo por fraude se reduce en un 60% .

La efectividad de esta herramienta queda evidenciada en el gráfico adjunto, donde se muestra el costo promedio del fraude en empresas que tienen implementadas líneas de denuncia versus las que no cuentan con la herramienta. Como se puede observar, en aquellas donde no existen líneas de reportes de irregularidades el costo promedio del fraude se duplica.

Gráfico correspondiente al último reporte bianual al 2006 de la ACFE emitido en 2007

Este tipo de herramientas son utilizadas con éxito en EE.UU. desde hace más de veinte años, pero el mayor auge lo han adquirido desde la sanción de la Ley Sarbanes Oxley, que obliga a las empresas que cotizan en la Security and Exchange Comission (SEC) a habilitar líneas para que su personal pueda reportar hechos de fraude y corrupción incluso en forma anónima. En Latinoamérica, este tipo de herramientas han adquirido mayor relevancia y numerosas compañías las han incorporado, no solo para cumplir con las reglamentaciones legales, sino también como una mejora en sus prácticas de control. En el gráfico adjunto se puede observar que las denuncias son el principal medio de detección de fraudes a nivel mundial.

Pero ¿en qué consiste una línea de denuncias? Christian Urreli, CEO de Resguarda, empresa pionera en Líneas de Denuncia que presta servicios desde Buenos Aires a varios países de Latinoamérica, nos explica: “las líneas de denuncias consisten en canales confidenciales de comunicación para que empleados, proveedores y clientes de una organización puedan informar durante las 24 horas, los 7 días de la semana en forma anónima, confidencial y segura hechos de corrupción o cualquier otro tipo de situaciones que afecten el adecuado clima ético. Estas denuncias son informadas en forma directa al Comité de Dirección de la empresa, quien decide las acciones a tomar”. Garantizar el anonimato es una de las claves del éxito en la implementación del servicio. En Argentina, como nos explica Urreli “el 93% de las denuncias son anónimas, por lo cual la confidencialidad es una de las prioridades al implementar este tipo de sistemas”. Según una encuesta hecha por la consultora Lisicki, Litvin y Asoc. entre más de 1.200 ejecutivos argentinos, más del 80% de los encuestados señaló que es fundamental la confidencialidad para que accedan a realizar una denuncia; ya que si perciben que pueden correr algún riesgo, prefieren no realizarla.

En lo que respecta a los canales de reporte, los denunciantes pueden usar distintos medios para comunicar las irregularidades ya sea llamando a un 0800, Fax, Mail, vía Web, entre otros. El medio más efectivo es el telefónico (normalmente es un 0800 gratuito), ya que el reportante puede ser atendido por un especialista quien lo orienta en el proceso. Normalmente es el propio personal de la organización el que realiza la mayor cantidad de denuncias, aunque también en menor medida las denuncias son realizadas por clientes y proveedores.

En Argentina, numerosas empresas han incorporado líneas de denuncia. Algunas de las mismas para cumplir con normativa internacional y otras como mejor práctica de control interno y administración de recursos humanos. Este sistema ha permitido detectar y prevenir irregularidades de diversa índole. En este sentido Matías Elbert, Gerente de Auditoría Interna de Megatone (red de venta de productos electrodomésticos), nos cuenta su experiencia: “la implementación de las líneas de denuncia nos permitió detectar situaciones irregulares y controlar mejor el negocio, especialmente en temas relacionados con el otorgamiento de créditos, stock y el control sobre las sucursales.

El éxito de este sistema está dado por su alta relación costo beneficio, ya que la inversión necesaria para la implementación es baja respecto de los beneficios que les genera a las organizaciones. Asimismo, el hecho de contratar el servicio en forma externa, motiva a los empleados a realizar denuncias porque da transparencia al proceso y deja de lado el temor a ser identificados en el caso de realizar las denuncias en forma anónima.

En Argentina, Chile y Brasil este servicio también ha sido muy útil para identificar conflictos en todo lo referente a Recursos Humanos, como por ejemplo malos tratos, acoso u otros conflictos laborales. En este sentido, esta herramienta ha funcionado preventivamente detectando situaciones que en otros casos pueden terminar en causas judiciales o demandas laborales.

En lo que respecta al tipo y cuantía de denuncias recibidas (ver cuadro adjunto), varían mucho de una organización a otra. En Argentina, el mayor número está vinculado con fraudes y temas referentes a Recursos Humanos. El total de denuncias recibidas anualmente, según expresa Christian Urreli, COO de Resguarda, depende de la cantidad y tipo de usuarios (personal, proveedores, clientes, etc) y a la cultura organizacional de la Corporación. En promedio la cantidad anual de denuncias recibidas varia entre un 2% y un 5% del total de la dotación de empleados en forma anual, aunque este número puede incrementarse cuando existen problemas que involucran a un sector en particular de la organización, indica Urreli.





Fuente: http://www.iaia.org.ar
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